En un futuro donde los mutantes están
desapareciendo debido a un programa de destrucción que tiene por buscadores a
los centinelas, unos robots gigantes capaz de adaptarse a cada uno de los
mutantes con el fin de eliminarlos por completo. Debido a esto los X-Men buscan
la manera de regresar al pasado para cambiar el futuro provocando que todo sea
mucho más sencillo. Es así como Wolverine (Hugh Jackman) tendrá que buscar en
el pasado a los mutantes necesarios para detener a Mystique (Jennifer Lawrence)
puesto que es ella la bomba que hará que el balance entre mutantes y humanos
nunca se logre. Un largo viaje que recorrer que podría cambiar de una u otra
manera el curso de las cosas.
La espera ha terminado y X-Men:
Days of Future Past llega a nuestras pantallas para entregarnos una de las
mejores cintas de comics de todo el año. Es cierto que First Class no fue de
todo mi agrada puesto que es demasiado lenta y la historia tenía el gran
problema de contener pésimas interpretaciones por los personajes más fuertes de
la misma pero eso aquí lo vemos arreglado con un gran avance en cada uno de los
mutantes inmersos en esta impactante película. La historia utiliza a los
personajes del futuro para arreglar el pasado debido que ahora la raza mutante
está desapareciendo debido a un mal entendido provocado por la maravillosa
Mystique todo esto apoyado de un gran respaldo en cada uno de los involucrados.
Aquí tenemos la oportunidad de ver la maldad pura de este personaje
interpretado de manera majestuosa por Jennifer Lawrence y su gran dificultad al
decidirse porque es lo correcto.
Por otro tenemos a Michael Fassbender
quien sin duda es uno de los mejores actores que tenemos actualmente ya que con
un solo dialogo tenemos más que suficiente para entender a su personaje por
completo viendo que es lo que lo hizo ser como es, junto a su contra parte
representada por el único Ian McKellen quien con casi nulos diálogos logra
demostrar su habilidad actoral siendo un Magneto que todos recordaremos por
siempre. James McAvoy quien fuera el peor error de First Class corrige todos
sus errores para entregarnos al Charles que queríamos ver teniendo una de las
mejores escenas de toda la cinta. A la par tenemos al inigualable Peter
Dinklage haciendo de las suyas demostrando porque es un actor que merece ser
explotado. El resto del elenco da todo de sí para poder convertir a esta película
en un viaje en el tiempo donde con pocas escenas logran entrar en nuestra mente
para mantenerla en pie.
Hugh Jackman es el único Wolverine que existe y
será muy triste cuando dejemos de verle en este papel pues lo tiene tan
manejado que es imposible imaginarse a nadie más en el pero el día no está muy
lejos y Jackman ha decidido cerrar ese círculo poco a poco de manera magnifica
con un Wolverine lleno de decisiones siendo el líder de un grupo roto
completamente siendo el quien da sentido a toda la cinta. Es cierto que todos
saldremos con los ojos salidos y emocionados como nunca antes dejándonos ver
que X-men es uno de los mejores comics que tenemos junto a una de las películas
que seguramente serán recordadas de por vida pero al final también puede ser un
poco frustrante ver a tanto mutante que no es nada relevante o que son usados
en tan solo una escena de toda la cinta sin embargo este factor es olvidado por
el trabajo tan impresionante del director de X-Men Bryan Singer.
Calf: 10/10
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